Con pozol en mano, el pueblo de Tuxtla se alegra por el inicio de una nueva ERA

Tuxtla Gutiérrez, Chiapas; 10 de junio de 2024.- En un ambiente de júbilo y con mucha esperanza rumbo a la nueva ERA, la capital de Chiapas, se vistió de fiesta para conmemorar la votación histórica de 1,866,190 en favor de Eduardo Ramírez Aguilar, gobernador electo.

                ciudadanía tuxtleca, conmemoró que en las recientes elecciones en Chiapas; el triunfo del Pueblo, que representa no solo un hito político, sino también una renovada esperanza para las y los chiapanecos, quienes ven en Eduardo Ramírez a un líder capaz de guiar a la entidad hacia un futuro próspero y lleno de oportunidades.

                hombres y mujeres, entregaron en parques, mercados y plazas de mano en mano la delicia del pozol, que es la bebida ancestral que con su frescura y sabor evocaron lo que el gobernador electo había dicho, de retomar la historia en esta nueva era del gobierno, a partir del 8 de diciembre próximo.

                Las y los miles de asistentes que testificaron el acto de entrega de la constancia en el Instituto de Elecciones y Participación Ciudadana (IEPC), también reconocieron el trabajo de la Ruta del Jaguar en Tuxtla Gutiérrez, aunque esta organización ya cobra importancia en otros municipios de la entidad.

                Eduardo Ramírez, en su discurso de agradecimiento, subrayó su compromiso con el progreso y el bienestar de Chiapas, asentó temas como la educación, indigenismo, desarrollo, paz y desde luego la justicia, al tiempo de señalar que evocará a la historia, para reafirmar y celebrar la identidad cultural que hace de este estado un lugar único y especial.

                El líder de la Ruta del Jaguar, agradeció a sus seguidores y a todo el pueblo chiapaneco participante, por ese apoyo y confianza, destacó que, como organización civil, seguirán trabajando de manera incansablemente para mejorar las condiciones de vida y fomentar el desarrollo integral de la capital y de la zona metropolitana.

                Y es que este júbilo, no podría haber tenido un mejor escenario que las mismas calles de Tuxtla Gutiérrez, donde la bebida típica, jugó un papel protagónico, que deleitaron a los asistentes y resaltaron la rica herencia culinaria del estado, ante un calor que abrazó a las y los ciudadanos.