Tuxtla Gutiérrez, Chiapas. – En el marco de las festividades patrias, el Gobernador Eduardo Ramírez Aguilar presidió por primera vez la ceremonia del Grito de Independencia en Chiapas, ante una plaza central de Tuxtla Gutiérrez abarrotada por miles de chiapanecos.
El acto cívico estuvo marcado por un profundo simbolismo y un mensaje de unidad. Previo al grito tradicional, se llevó a cabo un ritual tsotsil, con el cual el mandatario refrendó su compromiso con el pueblo chiapaneco y, en especial, con los pueblos indígenas. En este marco, recibió el bastón de mando, símbolo de autoridad y responsabilidad ante la comunidad.
Acompañado de su familia, el Gobernador Ramírez se dirigió a la multitud desde el balcón de la sede del gobierno estatal. Tras los habituales vivas a los héroes de la independencia como «¡Viva Hidalgo!» y el estruendoso «¡Viva México!», el mandatario destacó con énfasis un grito particular que resonó en la noche: «¡Viva la paz en Chiapas!».
La ceremonia concluyó con un espectáculo de fuegos pirotécnicos que iluminaron el cielo de la capital chiapaneca, complementado con innovadoras formaciones de imágenes proyectadas por una flota de drones, que deleitaron a los asistentes.
El evento, desarrollado en un ambiente de festividad y alegría, subrayó no solo la conmemoración de la independencia nacional, sino también una clara apuesta por la paz y el reconocimiento a la diversidad cultural del estado.
